- Hemorragia intraoperatoria
Especialmente de los vasos epigástricos o sus ramas en el borde lateral de la vaina de los rectos
Terapia: ligadura inmediata/hemostasia
- Lesión intestinal en el marco de la adhesiolisis
Profilaxis: preparación cuidadosa, por capas, si es necesario inicio de la preparación en el área libre de defectos, desde allí representación del defecto fascial y del contenido de la hernia. Apertura temprana del saco herniario.
Las deserosaciones deben reconocerse y suturarse inmediatamente.
En lesiones transmurales, la localización (intestino delgado-colon) y la cantidad de salida de contenido intestinal son decisivas, si es necesario posponer la implantación de la malla.
- Incapacidad para cerrar la vaina de los rectos anteriorTécnica de bridging: En el caso de que las láminas fasciales anteriores no se puedan unir completamente, es admisible una fijación de los bordes fasciales en la malla ya colocada en posición sublay con una sutura continua no reabsorbible en el sentido de un bridging anterior parcial. Si se trata una hernia grande con un cierre fascial dorsal, una malla sublay en posición retromuscular y un bridging residual mínimo de la fascia anterior y se logra un cierre cutáneo primario por encima, se puede asumir un resultado satisfactorio.
-
Complicaciones intraoperatorias
-
Complicaciones postoperatorias
- Hemorragia posquirúrgica/Hematoma
Control ecográfico, en caso de progresión del tamaño posiblemente punción. Hemorragias posquirúrgicas relevantes para Hb y hematomas sintomáticos grandes deben ser revisados.
Hemorragias posquirúrgicas después de la eliminación de los drenajes Redon: Erosión por drenaje Redon. La succión debe eliminarse antes de tirar, para evitar que el drenaje aspirado cause hemorragias en el canal de drenaje o en la musculatura.
- Perforación intestinal secundaria no detectada
Evitar la lisis de adherencias intestinales interentéricas, posiblemente solo preparación cercana a la pared abdominal posiblemente con inclusión del peritoneo parietal/fascia transversalis, para garantizar una distancia segura a las asas intestinales firmemente adheridas.
En caso de desviación del curso postoperatorio esperado y sospecha de una lesión intestinal no reconocida (fiebre, peritonismo, íleo, parámetros de infección) debe explorarse quirúrgicamente. Reoperación con detección de la lesión intestinal y sutura, posiblemente resección y lavado abdominal, tratamiento antibiótico, posiblemente explantación de la malla. Letalidad aprox. 3 %.
- Situación de compartimento abdominal
Reducción de la excreción urinaria posiblemente medición de la presión vesical. Disolución de la reconstrucción de la pared abdominal, al menos parcialmente.
- Parálisis intestinal postoperatoria/íleo manifiesto
Una parálisis intestinal después de una lisis de adherencias extensa o sutura de la pared intestinal es frecuente. Se recomienda un aumento lento de la dieta posiblemente administración de medicamentos antieméticos, para evitar arcadas y vómitos, lo que podría poner en peligro la reconstrucción fresca. Profilaxis mediante PDC y movilización temprana. Intento con estimulación intestinal conservadora posiblemente administración de un procinético (p. ej. neostigmina). En caso de un íleo manifiesto reoperación con detección y corrección de la causa.
- Dolores crónicos postoperatoriosDolores postoperatorios crónicos definidos ya en 1986 por la «International Association for the Study of Pain» como dolores que persisten más de tres meses a pesar de una terapia conservadora óptima. Posibles causas son un daño traumático de los nervios por sutura en la fijación de la malla especialmente con el uso de material de sutura no reabsorbible.
Analgesia postoperatoria consecuente. En dolores refractarios a la terapia, que se localizan puntualmente en un hilo/knoten transfascial, este debería eliminarse a través de un acceso circunscrito. Identificación de una propagación segmentaria e intento de bloqueo segmentario posiblemente neurectomía del nervio intercostal afectado. Eliminación de la malla como última ratio.
Factores de riesgo son dolor preexistente o mal controlado en el postoperatorio temprano, sexo femenino y anchura de la brecha herniaria > 10 cm.
- Seroma
- Un seroma depende del tamaño del saco herniario y está presente regularmente sin consecuencia terapéutica, posiblemente control ecográfico de evolución.
- Terapia: Esperar al menos 4-6 semanas, luego posiblemente punción estéril. En seromas muy grandes y molestias o sospecha de sobreinfección colocación ecográfica o guiada por TC de un drenaje con succión. En casos raros en persistencia y formación de una cápsula de seroma excisión quirúrgica.
Profilaxis: Colocación de drenajes Redon y eliminación solo después de cesar la secreción.
- Trastorno de la cicatrización de la herida/Necrosis cutáneas
En movilizaciones subcutáneas de gran superficie debe prestarse atención, en la medida de lo posible, a los vasos perforantes, para evitar necrosis cutáneas.
- Infección de la herida/Infección de la mallaInfección de la herida superficial: Procedimiento conservador con tratamiento abierto de la herida
Infección de la herida subfascial con afectación de la malla: tratamiento abierto de la herida, posiblemente VAC
- Recidiva
En recidiva clínicamente irrelevante con ausencia de síntomas, generalmente como hallazgo casual en una imagen por otros motivos, debería indicarse una intervención quirúrgica con mucha cautela. En progresión del tamaño o molestias debería considerarse una reoperación.
- Hemorragia posquirúrgica/Hematoma