- Factores de riesgo típicos para lesiones intraoperatorias son:
- Obesidad
- Anatomía alterada por operaciones previas, inflamaciones y tumores
- Intervenciones de emergencia
Lesión intestinal
- Las lesiones menores se suturan.
- Defectos mayores con bordes mal delimitados se extirpan de forma conservadora y se suturan o se realiza una resección cercana a la pared intestinal con anastomosis.
- Los defectos de la serosa deben reserosarse de forma generosa.
Lesión esplénica
- Debe intentarse siempre una terapia conservadora del bazo, ya que esta se asocia a una tasa de complicaciones menor que la esplenectomía.
- Electrocoagulación de defectos capsulares; parches hemostáticos; compresión y paciencia
- En lesiones más profundas, colocación del bazo en una bolsa de malla de plástico reabsorbible, con lo que se logra una compresión tisular continua. Como última ratio, esplenectomía.
Lesión pancreática
- ¡Ligaduras de sutura fina para prevenir fístulas pancreáticas!
- Se recomienda la colocación de un drenaje para poder drenar la secreción en caso de fístula pancreática.
Lesión ureteral
- Esto se puede evitar si se procede de forma estratificada y cuidadosa, asegurándose de que solo se movilice el mesosigma desde lateral.
- Además, el uréter debe identificarse, pero para preservar los plexos nerviosos que discurren en esta región, no debe realizarse una disección extensa. También debe evitarse el lazo.
- En operaciones previas y adherencias debidas a inflamación o tumores con pérdida de las capas anatómicas en la pelvis menor, puede considerarse un cateterismo preoperatorio del uréter para facilitar su identificación.
- Tratamiento conservador en lesiones superficiales.
- Las lesiones incompletas se cateterizan (catéter Double-J) y se cierran con sutura directa.
- En transecciones completas, se realiza una anastomosis estanca y sin tensión con cateterismo del uréter.
- Lesiones extensas o resecciones parciales requieren reconstrucciones urológicas complejas (derivación, implantación en el lado opuesto, plastia de Psoas-Hitch).
Lesiones vasculares
- Constelación de riesgo en crecimiento tumoral que sobrepasa límites, inflamación, operaciones previas o después de radioterapia.
- No realizar intentos de sutura a ciegas, sino sutura vascular controlada o inicialmente compresión sostenida.
- En otras causas, reconocimiento y localización de la fuente de sangrado, control primario del sangrado mediante compresión o pinzamiento, información a la anestesia y preparación de concentrados de sangre, si es necesario, consulta a un cirujano vascular y preparación de un injerto vascular, creación de una visión anatómica, reparación del defecto vascular.
Sangrados del plexo sacro
- Esta complicación muy grave, que puede volverse rápidamente amenazante para la vida, se evita preparando de forma muy exacta en la capa de deslizamiento mesorrectal.
- Si aun así se produce un sangrado, por lo general no es posible controlarlo con suturas (excepción: sangrados tras lesiones de la V. iliaca interna o externa). Aquí es más sensato ejercer presión durante varios minutos como medida inmediata para detener el sangrado. Si se produce un sangrado más extenso, se recomienda seccionar rápidamente el recto bajo compresión pasajera con el grapador y tamponar la pelvis.