Analgesia postoperatoria
- AINE, posiblemente también analgésicos opioides
Siga aquí el enlace a PROSPECT (Gestión del dolor postoperatorio específico de procedimientos).
Siga aquí el enlace a la guía actual Tratamiento del dolor agudo perioperatorio y postraumático.
Tratamiento médico posterior:
- Control clínico estricto en las primeras 4 a 6 horas postoperatorias para detectar/excluir un sangrado posterior.
- Retirada de eventual(es) drenaje(s) de Redon en el primer día postoperatorio
- Laringoscopia antes del alta a más tardar dentro de los 7 días después del alta
- Controles de laboratorio
- Valores de calcio sérico y parathormona 12-24 h postoperatorios para detectar trastornos de la función de las glándulas paratiroides e iniciar tempranamente una terapia medicamentosa.
- En caso de síntomas de hipocalcemia, valores de calcio sérico < 2,00 mmol/l o PTH < 15 pg/ml sustitución oral con calcio 3 x 1 g y calcitriol 2 x 0,5 µg por día durante 14 días.
- El nivel de PTH se correlaciona mejor con la necesidad de una sustitución de calcio/vitamina D. PTH ≥ 15 pg/ml -> alta sin riesgo posible, PTH < 10 pg/ml -> sustitución de calcio/vitamina D, PTH entre 10 y 15 zona gris -> control después de 48 h postoperatorias para una evaluación segura útil, hasta entonces en todo caso sustitución.
- Controles estrictos para prevenir una hipercalcemia iatrogénica. Posiblemente suspender gradualmente la sustitución.
- Sustitución de hormonas tiroideas
Después de una tiroidectomía completa, sin sustitución hormonal se produce una hipotiroidismo manifiesto dentro de dos a como máximo cuatro semanas. En caso de diagnóstico benigno, por lo tanto, es útil comenzar con la administración de L-tiroxina pocos días postoperatorios. La dosis media de sustitución de L-tiroxina según un estudio actual es de 1,7 microgramos/kg/día, el valor objetivo de TSH de 0,5 a 2,0 mU/l. Un control de TSH después de 6-8 semanas es útil para ajustar eventualmente la dosificación.
En caso de diagnóstico maligno, después de una lobectomía o tiroidectomía sin terapia con radioyodo, se debe aspirar a un valor objetivo de TSH en el rango normal inferior (0,5 a 2,0 mU/l). No se debe realizar una terapia supresora de TSH.
En caso de terapia con radioyodo planificada, procedimiento adicional véase más abajo.
Profilaxis de trombosis:
La necesidad de una profilaxis de trombosis en operaciones de tiroides depende del riesgo individual.
- En caso de bajo riesgo (paciente joven, sin factores de riesgo, operación corta) no se recomienda profilaxis medicamentosa rutinaria, sino movilización temprana.
- Riesgo aumentado (edad > 60 años, obesidad, trastorno de coagulación, TVP anterior, duración de operación más larga) profilaxis farmacológica con heparina de bajo peso molecular (HBPM) o fondaparinux, generalmente comenzar por la noche pre- o postoperatoriamente con movilización temprana simultánea (posiblemente en el día de la operación o 1er día postoperatorio).
- Duración de la profilaxis generalmente hasta la movilización completa, la mayoría de las veces 1–5 días postoperatorios
- La decisión sobre una profilaxis de trombosis depende en gran medida del perfil de riesgo individual, no automáticamente del tipo de operación.
- ¡Evaluación cuidadosa del riesgo de trombosis frente al riesgo de sangrado! Debe evitarse una anticoagulación demasiado agresiva.
- A tener en cuenta: función renal, HIT II (anamnesis, control de plaquetas)
Siga aquí el enlace a la guía actual: Profilaxis de la tromboembolia venosa (TEV)
Movilización: ya en el día de la operación
Fisioterapia: en caso de molestias cervicales debidas al posicionamiento, posiblemente medidas físicas
Construcción de la dieta: dieta completa en el día de la operación
Regulación del tránsito intestinal: por lo general no requerida
Alta: en caso de evolución sin complicaciones posible a partir del 2º día postoperatorio
Incapacidad laboral: individualmente diferente, aprox. 10 - 14 días después del alta, en caso de terapia con radioyodo indicada considerablemente más larga
Operación de completación
Debido a la falta de posibilidades de identificación pre- e intraoperatorias del FTC, después del diagnóstico histológico postoperatorio surge la pregunta de la operación de completación con terapia adyuvante con radioyodo bajo evaluación del riesgo de persistencia o recidiva tumoral. La operación está indicada en caso de detección de metástasis a distancia o linfáticas, un FTC ampliamente invasivo o detección de angioinvasión (≥4 vasos). Factores de riesgo son un tamaño ≥4 cm, una edad >55 años y una resección tumoral incompleta.
Si la operación de completación incluye el lado previamente operado, se recomienda la intervención dentro de 4 días o en el intervalo de 3 meses después de la primera intervención. En caso de resección tumoral primaria incompleta, se debe operar en todo caso de manera oportuna.
En caso de una operación solo contralateral después de hemotiroidectomía en la primera intervención, según datos actuales no hay indicios de un riesgo de complicaciones aumentado. Debido a cicatrices/adherencias ventrales, se recomienda para la completación un acceso lateral primario. No se recomiendan operaciones de completación sin uso de IONM.
Si se presenta como hallazgo incidental un MTC, se puede prescindir de una operación de completación si en las primeras 2 semanas después de la resección la calcitonina no está elevada y el examen genético humano excluye un MTC hereditario.
Terapia con radioyodo (131I) para la ablación de tejido tiroideo residual postoperatorio
La terapia ablativa con 131 yodo es estándar en el carcinoma diferenciado de tiroides después de la operación. Excepciones son el microcarcinoma papilar sin factores de riesgo y los tipos de FTC de baja malignidad (grupo de bajo riesgo).
Solo después de una terapia adyuvante con radioyodo, la gammagrafía corporal total con 131 yodo y la medición de tiroglobulina bajo estimulación con rhTSH (hormona estimulante del tiroides humana recombinante) se convierten en métodos de examen sensibles y específicos para asegurar el éxito de la terapia.
La sensibilidad de la gammagrafía corporal total depende del nivel de TSH; favorable es un TSH basal > 30 mU/l. Este nivel de TSH se puede lograr 3 - 5 semanas después de la tiroidectomía, 4 – 5 semanas después de suspender una medicación con levotiroxina (T4) o después de estimulación exógena con TSH humana recombinante (rhTSH).
En pacientes de alto riesgo, la secreción de TSH debe estimularse endógenamente, siempre que no existan contraindicaciones para un hipotiroidismo.
En comorbilidades del paciente como enfermedades cardiopulmonares, diabetes mellitus, insuficiencia renal, enfermedades neurológicas y psiquiátricas, así como en paresia recurrencial bilateral (peligro de edema glótico en caso de hipotiroidismo grave), no es aconsejable una abstinencia hormonal de varias semanas con la consecuencia de un hipotiroidismo manifiesto y la estimulación exógena de TSH con rhTSH es el método de elección.
Los resultados de una terapia con 131 yodo son tanto mejores cuanto menor sea la masa tumoral y mayor el grado de diferenciación. Además, la terapia con 131 yodo tiene buenos efectos paliativos en tumores inoperables así como no completamente extirpables quirúrgicamente, si existe una captación de radioyodo.
6 – 8 meses después de una terapia ablativa con radioyodo, se debe evaluar mediante la gammagrafía corporal total diagnóstica con 131 yodo y el nivel de tiroglobulina bajo estimulación con rhTSH si se ha logrado la eliminación deseada del tejido tiroideo residual y si existen indicios de metástasis captadoras de yodo.
Tiroglobulina (Tg)
La tiroglobulina es un marcador importante para la capacidad de síntesis del tiroides. Sirve principalmente para el seguimiento postoperatorio de carcinomas papilares o foliculares de tiroides.
Solo después de tiroidectomía y terapia ablativa con 131 yodo, la tiroglobulina es un marcador tumoral sensible y específico para el carcinoma diferenciado de tiroides, donde la sensibilidad se aumenta mediante la abstinencia de hormonas tiroideas o mediante una estimulación con rhTSH.
La terapia del carcinoma diferenciado de tiroides está bien estandarizada con la secuencia de operación, terapia con 131 yodo y medicación con levotiroxina.
Seguimiento
El concepto de seguimiento adicional, incluyendo el alcance de la imagen morfológica y funcional, se orienta fuertemente en una reevaluación del riesgo individual mediante la medición del nivel de tiroglobulina estimulado con rhTSH – combinado con una gammagrafía corporal total con 131I – aproximadamente 6 – 8 meses después de la terapia ablativa con radioyodo. Para muchos pacientes, el seguimiento se reduce después a ecografía, medición del nivel de Tg con ensayos modernos (incl. recuperación de Tg y anticuerpos anti-Tg) así como la determinación de los parámetros de función tiroidea.
Nota: Los anticuerpos anti-Tg interfieren en la determinación de la tiroglobulina y hacen que el valor sea poco fiable en caso de positividad de anticuerpos.
Por lo tanto, en cada medición de Tg debe determinarse paralelamente anti-Tg-AC para evaluar correctamente el poder predictivo. En caso de positividad de anticuerpos, no Tg, sino el título de anti-Tg-AC mismo se convierte en el parámetro de evolución.
El seguimiento incluye la verificación y ajuste medicamentoso de la sustitución o supresión de hormonas tiroideas, así como el diagnóstico y terapia de complicaciones típicas de la terapia primaria. Esto incluye una ecografía de la logia tiroidea y de los tejidos blandos del cuello incl. ganglios linfáticos, determinación del marcador tumoral tiroglobulina y de los anticuerpos anti-tiroglobulina, así como la verificación laboratorial de la terapia con hormonas tiroideas.
Ajuste del valor de TSH en el curso a largo plazo de pacientes con carcinoma diferenciado de tiroides
La tiroglobulina se mide estimulada o no estimulada según la situación.
Tg estimulada es más sensible y se utiliza especialmente en la primera fase de seguimiento o en sospecha de recidiva.
Tg no estimulada es suficiente en pacientes a largo plazo sin hallazgos con anti-Tg-AC negativos en general.
Después de la evaluación de respuesta 6 - 12 meses después de la terapia inicial (operación ± terapia con radioyodo) pueden surgir las siguientes constelaciones:
Respuesta excelente
- En pacientes con respuesta excelente se debe aspirar a un valor de TSH de 0,5 – 2,0 mU/L. Se define una respuesta excelente como Tg < 0,2 ng/mL (no estimulada) o < 1 ng/mL (estim.) sin detección de anticuerpos, sin indicios de imagen de recidiva/metástasis.
Respuesta bioquímicamente incompleta
- En pacientes con respuesta bioquímicamente incompleta Tg ≥1 ng/mL (no estim.) o > 10 ng/mL (estim.) se debe aspirar a un valor de TSH de 0,1 – 0,5 mU/L considerando posibles factores de riesgo. El término “respuesta bioquímicamente incompleta” en el carcinoma diferenciado de tiroides se refiere a la evaluación de la respuesta a la terapia basada en valores de tiroglobulina (Tg) y posiblemente anticuerpos anti-Tg – es decir, marcadores bioquímicos, sin que sea detectable un tumor por imagen.
Respuesta estructuralmente incompleta
- En pacientes con respuesta estructuralmente incompleta se debe aspirar a un valor de TSH de < 0,1 mU/L considerando posibles factores de riesgo. Por respuesta incompleta se entiende aquí la detección de tumor o metástasis en la imagen.
Nota: En los rangos de TSH mencionados se trata de valores objetivo que deben alcanzarse aproximadamente. Deben evitarse cambios frecuentes de la dosificación de hormonas tiroideas.
Carcinoma medular de tiroides
En caso de curación bioquímica (nivel de Ctn postoperatorio no medible bajo) se deben realizar exámenes de seguimiento semestrales en los primeros 2 años con ecografía del cuello, determinación de Ctn y CEA. Después, si no ha habido aumento de Ctn, se puede pasar a controles anuales o intervalos aún más largos. El pronóstico es muy bueno.
Nota: El antígeno carcinoembrionario (CEA) es el segundo marcador tumoral en el MTC. No debe usarse para el diagnóstico preoperatorio. Es un marcador más estable en comparación con Ctn para el monitoreo tumoral y puede usarse en el control de evolución en el MTC metastásico.
Carcinoma anaplásico de tiroides
A causa del mal pronóstico, el seguimiento se realiza orientado a los síntomas.